Ideal para colocar en el caso del ciclista o en la mochila. Esta miniluz se compone de 4 LED rojos que garantizan una visibilidad óptima en cualquier circunstancia. Está confeccionada en acrilonitrilo estireno (AS) plástico, cuenta con un diámetro total de 3,4 cm y un adhesivo con un diámetro de 2,55 cm. Sus funciones de iluminación son: fijo, parpadeo, rotatorio y apagado. Se presenta en un blíster. LA MEJOR LUZ PARA TU BICI PARA SALIDAS EN LA MONTAÑA Aquí no es tan importante que te vean cómo que veas muy bien por dónde vas. Por eso es importante apostar por una luz delantera potente y de alta luminosidad sujeta al manillar. ¿Cómo saber la potencia? Solo hay dos parámetros reales para describir la potencia y rendimiento de luz: Lux y Lumen. El Lux (lx) indica cómo de brillante es la luz y el Lumen (lm) mide la densidad de la luz percibida por el ojo humano. Si tienes dudas, lo ideal es que pruebes la luz antes de decidirte. Un consejo: si sueles hacer salidas largas, presta mucha atención a las horas de vida útil de la batería. PARA MOVERSE POR LA CIUDAD En este caso no es necesario contar con unas luces muy potentes. No es tan importante ver (la iluminación urbana será tu aliado) cómo ser visto por los otros vehículos. Con un conjunto delantero y trasero de luces LEDs es más que suficiente. Pueden ser fijas o desmontables, o incluso pequeñas luces portátiles de quita y pon. Si usas la bici de manera esporádica, una buena opción son las luces que funcionan con pilas, porque son más económicas que las de batería recargable de litio.